¿Cuál es el propósito de
las Orientaciones generales para docentes?
Orientar a los docentes acerca de los componentes que contiene
una experiencia de aprendizaje y ejemplificar el proceso de su diversificación,
cuidando la articulación entre los componentes que la integran. Asimismo, se especifica
la ruta general para acompañar a todos los estudiantes durante la experiencia
de aprendizaje.
Experiencia de
aprendizaje
Conjunto de actividades que conducen a los
estudiantes a afrontar una situación o problema complejo. Se desarrolla en etapas
sucesivas y, por lo tanto, se extiende a varias sesiones.
Estas actividades son potentes –desarrollan
el pensamiento complejo y sistémico–, consistentes y coherentes –deben tener
interdependencia entre sí y una secuencia lógica–.
Además, deben hacer referencia directa a
contextos reales o simulados y, si es posible, realizarse en dichos contextos.
La EdA es planificada intencionalmente por los docentes, pero también puede ser
acordada con los estudiantes, e incluso (si las posibilidades lo permiten) los
estudiantes pueden plantear de manera autónoma las actividades para enfrentar
el desafío.
Situación
La situación permite identificar y describir
contextos específicos, ya sea a nivel personal, familiar, local, regional,
nacional o global, reales o simulados (posibles en la realidad), creados intencionalmente
para el desarrollo de los aprendizajes de los estudiantes. Asimismo, promueve
el abordaje de problemáticas, actitudes, estereotipos y sesgos relacionados con
los enfoques transversales.
La situación debe ser retadora, desafiante y
significativa para el estudiante. Para ello, se plantea un reto, el cual se
formula como una pregunta o descripción que debe hacer el estudiante.
El reto debe ser abierto y claro, y
permitir que el estudiante reflexione y haga uso de sus competencias a partir
de la situación planteada. Además, debe generar un interés o cuestionamiento al
estudiante respecto a sus conocimientos, concepciones, actitudes,
representaciones, vivencias, emociones, ideas, creencias, entre otros aspectos.
Propósito de
aprendizaje
Presenta las competencias que requieren
movilizarse para responder al reto planteado en la situación. Se refiere a
aquello que explícitamente se quiere lograr o fomentar a partir de una
situación, por lo tanto, responde a la pregunta “¿Qué van a aprender los estudiantes?”.
El propósito debe ser compartido con los
estudiantes. Por esta razón, se recomienda partir de un diálogo con ellos,
analizar la experiencia entre todos, e identificar las competencias que
tendrían que movilizar para responder al reto de la EdA. Asimismo, es
conveniente orientarlos a reflexionar acerca de las competencias que deben
trabajar (es decir, que reconozcan sus necesidades de aprendizaje) para mejorar
su desempeño.
Enfoques
transversales
Aportan concepciones sobre las personas, su
relación con los demás, con el entorno y con el espacio común, y se traducen en
formas específicas de actuar, que constituyen valores y actitudes que la
comunidad escolar debe esforzarse por demostrar en la dinámica diaria de la
escuela. Los enfoques transversales se impregnan en las competencias que se
busca que los estudiantes desarrollen; orientan en todo momento el trabajo
pedagógico en el aula e imprimen características a los diversos procesos
educativos.
Criterios de evaluación
Son el referente específico para el juicio de
valor sobre el nivel de desarrollo de las competencias.
Describen las características o cualidades de
aquello que se quiere valorar y que los estudiantes deben demostrar en sus
actuaciones ante una situación en un contexto determinado. Se elaboran a partir
de los estándares y sus desempeños. Deben incluir a las capacidades de la
competencia que se requiere movilizar según la situación.