INTRODUCCIÓN
Desde comienzos
del 2020, cuando se desató mundialmente la pandemia por el coronavirus (COVID-19), se han generado diversos
impactos sobre los distintos sectores
y ámbitos de la sociedad. El
sector Educación se vio enormemente afectado por el cierre de las escuelas en casi todo el mundo, es
así que, UNESCO menciona que el cierre de escuelas
enfocado en la mitigación de la propagación del COVID-19 ha tenido efectos sobre cerca de 1.6 billones
de estudiantes en cerca de 190 países.
Asimismo, la disrupción del servicio educativo tiene como consecuencias inmediatas la
pérdida de aprendizajes y el abandono
escolar; por otro lado, en el largo plazo, genera impactos negativos en casi todos los sectores como la salud, el
bienestar y la protección social. Esta situación ha generado la rápida adaptación del servicio educativo
en diversos aspectos
para contrarrestar los efectos desfavorables del cierre de escuelas.
En nuestro
país, se emitieron
normativas para garantizar el servicio educativo
mediante su prestación a distancia, a fin de asegurar
la continuidad educativa de las y los estudiantes. A pesar de los esfuerzos
realizados por llevar el servicio
educativo a todos los/las estudiantes, según la encuesta de Semáforo
Escuela Remoto, el 10% de instituciones educativas
(IIEE) públicas no habrían accedido a la estrategia educativa Aprendo en casa (AeC) por ninguno de sus medios
de transmisión.
Según
el Sistema Alerta Escuela Remoto, aproximadamente, el 41.6% de los docentes identificó estudiantes en riesgo de
abandonar los estudios; asimismo, el 7.9% identificó estudiantes que abandonaron el servicio educativo. Asimismo, en
otros casos, los/las estudiantes lograron
acceder, pero no lograron avanzar
en el desarrollo de las competencias
establecidas. Esta situación ha generado un incremento de muchas de las brechas
preexistentes en cuanto el acceso,
el rendimiento y las oportunidades de aprendizaje, es decir, se ha exacerbado
la inequidad en el servicio
educativo.
Es importante resaltar que la escuela tiene
la responsabilidad de brindar un entorno seguro
a los/las estudiantes en el que pueden socializar, aprender y encontrar
soporte socio emocional, y darles la
oportunidad de desarrollar las competencias que les ayudarán a desenvolverse a lo largo de la vida. En
este sentido, mantener el cierre de las escuelas tiene diversas consecuencias negativas en los/las
estudiantes con relación
a sus aprendizajes y su desarrollo socioemocional.
Por ello para el año
2022 se dispone que todas las Instituciones y programas educativos retornen
a la semipresencialidad o presencialidad, en un proceso
seguro, flexible y descentralizado a la “Nueva
escuela”. Bajo este enfoque y principios, se ha desarrollado la Norma XXXXXX la
cual define los lineamientos y orientaciones para el retorno al servicio educativo presencial y semipresencial de
todos los servicios educativos en el año escolar 2022. La presente Norma tuvo un proceso de construcción con
diversos espacios de consulta con toda la comunidad educativa, incluidas familias, docentes,
directivos, especialistas de
las Direcciones Regionales de Educación (DRE) y Unidades de Gestión Educativa
Local (UGEL), y expertos en epidemiología del Minsa.
OBJETIVO
Brindar los lineamientos y orientaciones para el servicio
educativo presencial y semipresencial
para el año escolar 2022 en instituciones y programas educativos de la Educación Básica ubicadas en los ámbitos
urbano y rural, en el marco de la emergencia
sanitaria por la COVID-19.
ÁMBITO DE APLICACIÓN
·
Ministerio de Educación
·
Gobiernos regionales
·
Direcciones Regionales de Educación (DRE) o
las que hagan sus veces (GRE)
·
Unidades de Gestión Educativa Local
(UGEL)
·
Instituciones educativas y programas educativos públicos y privados de Educación
Básica Regular de ámbito rural y urbano: niveles de educación inicial, primaria
y secundaria; Educación Básica
Alternativa: ciclos inicial, intermedio y avanzado; y de Educación Básica Especial:
niveles inicial y primaria.
·
Gobiernos locales
BASE NORMATIVA
GLOSARIO DE TÉRMINOS Y SIGLAS
●
Espacios abiertos
●
Espacios cerrados
●
Soporte socioemocional
●
Soporte socioafectivo
●
Aforo máximo
●
Actividades educativas o deportivas
LA NUEVA ESCUELA
En
el marco de la emergencia sanitaria por la COVID – 19 se plantea la necesidad del
aislamiento social preventivo y obligatorio a nivel nacional,
lo que genera que los estudiantes
no puedan asistir de manera presencial a la institución educativa y que se planteen nuevas formas de darle
continuidad del servicio educativo para el desarrollo de competencias de los estudiantes. Esta situación ha llevado a la
comunidad educativa a descubrir
nuevos espacios, medios y formas creativas e innovadoras de responder a los desafíos
de acceder al servicio educativo
y propiciar el desarrollo de competencias aprovechando las tecnologías de la información.
Es
así como surge la propuesta de la "nueva escuela", que tiene como
centro el bienestar del estudiante y
busca ampliar la mirada hacia el desarrollo de experiencias diversas, dentro y fuera de la escuela, que
promuevan que los estudiantes construyan sus propios aprendizajes, pongan en juego sus competencias y se vuelvan cada
vez más autónomos en sus procesos
de aprendizaje.
Esto
implica que la escuela siga cambiando y en ese cambio están implicados todos
los actores educativos: estudiantes, docentes,
familias, directivos y comunidad en general. Se necesita que todos cambiemos
nuestros paradigmas sobre
la escuela y rediseñar juntos
la experiencia escolar,
reconociendo la importancia de la diversidad y el aporte de las experiencias vividas y
de los aprendizajes de la familia y la comunidad.